Cuantos más años tiene nuestro coche, más probable e inevitable es que se averíe. Al final todos los vehículos acaban visitando el taller o necesitan recurrir a un desguace para encontrar una pieza que sustituya la que está averiada.
En Desguaces Gómez Alén te contamos los fallos más comunes que puede presentar el motor de tu coche y cómo puedes solucionarlo de forma rápida, eficaz y económica.
Las averías más comunes del motor
Los testigos luminosos que conforman el cuadro de mandos del coche sirven para avisarnos de cualquier fallo que este pueda presentar. En el cuadro de mandos, que se ilumina tras encender el vehículo, podemos comprobar el tipo de error que existe si alguno de sus testigos permanece encendido durante un periodo demasiado largo. Principalmente, los sensores que más evidente se hace su presencia suelen ser los siguientes.
Un nivel bajo de aceite puede ocasionar una de las averías más comunes de un motor de coche. Este piloto del cuadro del mandos nos indica la cantidad de aceite que necesita el moto, pudiendo conocer si la cantidad es insuficiente y, por lo tanto, es necesario agregarle más.
Prestar atención a este indicador puede salvarnos de un problema mayor ya que si el motor tiene falta de aceite no dispone de la lubricación necesario, por lo que las piezas que lo componen podrían rozar entre ellas. Además, esta insuficiencia puede llevar aque aumente la temperatura de las piezas y con ella se pueden producir daños mayores en el motor.
Otro de los fallos del motor puede encontrarse en una baja temperatura de su aceite. Cuando encendemos el vehículo, este se encuentra a baja temperatura pero a medida que avanzamos el aceite se calienta y no hace de presionarlo. En caso de que la presión sea muy elevada o muy baja, pueden surgir problemas en el coche.
Esta señal que se encuentra en el cuadro de mandos puede indicar varias cosas, desde que la tapa de la gasolina está suelta hasta problemas en los sistemas de contaminación. En todo caso, ante estas señales se debe acudir a un mecánico lo antes posible para diagnosticar el fallo de inmediato y que derive en un problema menor.
¿Cómo detectar averías en el motor?
Además de estar pendiente de cualquier indicativo en el cuadro de mando sobre un posible error en el motor, también se debería alarmar en las siguientes situaciones:
- Comportamiento inestable del vehículo.
Una de las funciones del motor del coche es la de aportar suavidad y estabilidad durante los desplazamientos. Por lo tanto, si el coche se agita o se sacude en el trayecto se puede deber a un problema relacionado con el desgaste de las brujías o por la obstrucción del filtro de combustible.
- Explosiones y vibraciones.
Uno de los fallos que se detectan con mayor facilidad debido a su estruendo es una explosión de pequeño tamaño debido a un encendido anticipado de la gasolina en la cámara de combustión que provoca un fallo en los cilindros del motor. Además si se escucha un chirrido, este se puede asociar a un error en el sistema de arranque.
Si se detecta un olor extraño en la cabina del coche, existen dos posibles errores: residuos de aceite o filtrado de refrigerante. En caso de que este olor sea similar al de la goma quemada, el fallo puede deberse a que la correa de distribución está en mal estado.
En la situación donde el coche comienza a expulsar mucho humo con un olor un tanto extraño, este problema del motor puede deberse a un desgaste de los segmentos de los pistones, haciendo necesario acudir al mecánico de inmediato.
Como puedes comprobar el correcto funcionamiento y estado de todas las piezas del motor es vital para un buen desplazamiento en coche. En la mayoría de casos, estas averías implican un cambio de las piezas dañadas. Por eso, si tú coche ha sufrido algunas de las mencionadas anteriormente, confía en Desguaces Gómez Alén para conseguir un nueva pieza.